Entre el original y la copia
Daniel Molina
publicado en Diario Perfíl edición impresa, suplemento Cultural
domingo 7 de julio de 2013
La idea de originalidad es romántica. Surgió en la época de la Revolución Francesa, cuando se creía estar haciendo algo inédito. Si bien tomó cuerpo durante el Romanticismo, la idea de originalidad tiene una base material que es muy anterior: surge con los gremios de artesanos en la Edad Media. Una de las características de la artesanía es la calidad de la factura. Las piezas de mayor valor (tanto material como espiritual) eran aquellas que mostraban que eran fruto de una gran destreza manual. La muestra colectiva Edición limitada pone en cuestión tanto la idea de original como la de originalidad.
No es que los participantes en esta pequeña y hermosa muestra se hayan propuesto explícitamente criticar (menos aún, demoler) la idea de originalidad. Este trabajo intelectual lo viene realizando el arte contemporáneo desde los 60, aunque ya se la cuestionaba a la “originalidad” desde la época de Oscar Wilde. Es la práctica misma del arte de la copia (aunque sea limitada, como en este caso) la que desmonta el concepto de original.
Los artistas que participan de esta colectiva son Walter Alvarez, Bianki, Pablo Cabrera, Mariana Chiesa, Decur, Irana Douer, Mercedes Dutto, Delfina Estrada, Daniel García, Lola Goldstein, Isol, Carlos Massoch, Marían Elina Méndez, Liliana Porter, Ana Laura Pérez, Cristián Turdera, Vicky Vitar y Sofía Wiñazki. Aunque no aparece en el catálogo de mano, algunas de las obras exhibidas pertenecen a ese híbrido de @cristianturdera y @eltopoerudito que solo vive en Twitter y se llama @eltopoilustrado. No es un hecho menor el que uno de los “artistas” sea un colectivo que solo produce en estado virtual, siendo esta muestra la primera vez que materializa (en copia múltiple) su obra.
Todas las obras de Edición limitadas fueron producidas por algunas de las técnicas que permiten la reproducción (ya sea por medios artesanales o digitales de alta calidad) de un trabajo previo a la reproducción, pero que solo existe por medio de la reproducción. Esto permite que un grupo más amplio de coleccionistas pueda acceder a estas obras, ya que, debido a que son copias múltiples (por lo general, unas 10 de cada obra) los precios a los que se vende cada obra son inferiores a los que alcanza un “original”.
¿Importa la obra o importa que sea única? El mercado dice: importan las dos cosas, pero para fijar el precio, importa que sea única porque vale más, por su rareza. El arte dice: no importa en lo más mínimo la unicidad. Lo que importa de una obra no está en su rareza material, sino en lo que la obra dice y en lo que esto significa para el que la observa.
La selección y curación de la muestra corresponde a Linda Neilson, también responsable de la galería. Ella ha conformado un grupo sólido, que no tiene puntos flojos: algunos de los artistas exhibidos son más famosos (como Liliana Porter o Daniel García), otros son reconocidos esencialmente como ilustradores (como Turdera, Pérez, Isol, etc), pero todos los artistas seleccionados presentan obras hermosas.
Mar Dulce es una de las pocas galerías que pasa airosa la prueba del público infantil: los niños aman las obras que ellos presentan en sus muestras. La muestra Edición limitada además es una buena ocasión para iniciarse como coleccionista: hay obras bellísimas desde poco más de $1.000.
No es casualidad que sea una muestra de obras multicopia, que se ofrecen a un precio accesible, la que ponga claramente en entredicho la idea de “original”. Toda obra viene de otra obra: dialoga con la tradición a la que pertenece; ya sea que pretenda continuarla o que la enfrente.
No hay arte que surja de la nada: la originalidad es un mito pasado. Pero es más fácil verlo cuando la belleza no tiene pudor en repetirse.
Ficha:
Edición limitada
Varios artistas
Galería Mar Dulce
Uriarte 1490
Martes a sábados, de 15 a 20
hasta el 23 de agosto 2013
Gratis
